viernes, 25 de noviembre de 2016

Plinio El Viejo

[21] Argumentum huius stomachi mei habebis quod in his voluminibus auctorum nomina praetexui. est enim benignum, ut arbitror, et plenum ingenui pudoris fateri per quos profeceris, non ut plerique ex iis, quos attigi, fecerunt.
[22] Scito enim conferentem auctores me deprehendisse a iuratissimis ex proximis veteres transcriptos ad verbum neque nominatos, non illa Vergiliana virtute, ut certarent, non Tulliana simplicitate, qui de re publica Platonis se comitem profitetur, in consolatione filiae Crantorem, inquit, sequor, item Panaetium de officiis, quae volumina ediscenda, non modo in manibus cotidie habenda, nosti.

(21) De mi ánimo es prueba que se puede leer en la parte superior de los libros los nombres de los autores que he visto. De hecho, creo, que es cosa justa, franca y llena de honores, declarar quienes nos han sido útiles, no como hicieron la mayoría de los que he leído.
(22) Recuerdo comparando autores de los más famosos, y de nuestros tiempos, que han trascrito los antiguos palabra por palabra, y sin nombrarlos, bien lejos de la valentía de Virgilio, ni la franqueza de Cicerón, quien en su libro sobre la República, expresa ser imitador de Platón, quien en su consuelo por la muerte de su hija, dice, haber seguido a Crantor (de Cilicia, filósofo platónico), que admite que debe a Panecio (de Rodas, filósofo estoico) de officiis (Sobre los deberes), libro digno, como ya sabes, no sólo para ser llevado en las manos, sino para aprenderlo de memoria.

viernes, 18 de noviembre de 2016

Plinio El Viejo

[19] Quibus de causis atque difficultatibus nihil auso promittere hoc ipsum tu praestas, quod ad te scribimus. haec fiducia operis, haec est indicatura. multa valde pretiosa ideo videntur, quia sunt templis dicata.
[20] Vos quidem omnes, patrem, te fratremque, diximus opere iusto, temporum nostrorum historiam orsi a fine Aufidii. ubi sit ea, quaeres. iam pridem peracta sancitur et alioqui statutum erat heredi mandare, ne quid ambitioni dedisse vita iudicaretur. proinde occupantibus locum faveo, ego vero et posteris, quos scio nobiscum decertaturos, sicut ipsi fecimus cum prioribus.

(19) Si bien estas razones y las dificultades sin atreverme a prometer, a usted, por que me permite escribir, no es confianza en la obra, sino recomendación. Hay objetos que parecen valiosos, ¡porque se dedican en los templos!.
(20) Es cierto que todos nosotros escribimos, de su padre, su hermano y de usted, en una composición, en donde comenzó la historia de nuestro tiempo, que se detiene en Aufidius (Aufidius Bassus, historiador de tiempos de Tiberio). ¿Dónde está este libro, preguntará usted? Terminado hace mucho tiempo, recibió la sanción del tiempo. Y, también mi intención siempre ha sido de mandar a mi heredero su publicación, por temor a que me acusen en mi vida, de algo de ambición.  Deseo buena suerte a los que ocupen mi lugar y a los que me siguen, que sé que competirán con nosotros, como lo hemos hecho con nuestros predecesores.

viernes, 11 de noviembre de 2016

Plinio El Viejo

[17] XX Rerum dignarum cura—quoniam, ut ait Domitius Piso, thesauros oportet esse, non libros—lectione voluminum circiter VV, quorum pauca admodum studiosi attingunt propter secretum materiae, ex exquisitis auctoribus centum inclusimus XXXVI voluminibus, adiectis rebus plurimis, quas aut ignoraverant priores aut postea invenerat vita.
[18] Nec dubitamus multa esse quae et nos praeterierint. homines enim sumus et occupati officiis subsicivisque temporibus ista curamus, id est nocturnis, ne quis vestrum putet his cessatum horis. dies vobis inpendimus, cum somno valetudinem computamus, vel hoc solo praemio contenti, quod, dum ista, ut ait M. Varro, musinamur, pluribus horis vivimus. profecto enim vita vigilia est.

(17) Son Veinte mil hechos dignos de conservación (ya que los libros conviene que sean tesoros, como dice Domicio Pisón), veinte millas de lectura hechos en alrededor de dos mil libros, entre ellos un pequeño número está de mano de los científicos debido a la oscuridad de la materia, y de un centenar de Autores elegidos, fueron encerrados en treinta y seis libros, con la adición de muchas cosas que fueron ignoradas por nuestros predecesores, y por los hallazgos de la civilización. He hecho, sin duda, demasiadas omisiones pasadas por alto o por ignorancia.
(18) Sin duda soy hombre ocupado. Mi tiempo lo consumen los cargos públicos, y me ocupo de este trabajo en mi tiempo libre, es decir, durante la noche. Porque no quiero que mis príncipes me crean culpable de haber robado sus horas, debidos a ellos: a quienes me dedico durante el día, duermo cuando basta en nombre de la salud, que me satisface, es mi diversión, y de hecho, vivo así. Como dice Varrón, escribiendo vivo más horas porque la vida es vigilia.

viernes, 4 de noviembre de 2016

Plinio El Viejo

[15] Res ardua vetustis novitatem dare, novis auctoritatem, obsoletis nitorem, obscuris lucem, fastiditis gratiam, dubiis fidem, omnibus vero naturam et naturae suae omnia. itaque etiam non assecutis voluisse abunde pulchrum atque magnificum est.
[16] Equidem ita sentio, peculiarem in studiis causam eorum esse, qui difficultatibus victis utilitatem iuvandi praetulerint gratiae placendi, idque iam et in aliis operibus ipse feci et profiteor mirari me T. Livium, auctorem celeberrimum, in historiarum suarum, quas repetit ab origine urbis, quodam volumine sic orsum: iam sibi satis gloriae quaesitum, et potuisse se desidere, ni animus inquies pasceretur opere. profecto enim populi gentium victoris et Romani nominis gloriae, non suae, composuisse illa decuit. maius meritum esset operis amore, non animi causa, perseverasse et hoc populo Romano praestitisse, non sibi.

(15) que no es fácil dar un nuevo aire a lo anterior y autoridad, sobre lo que es nuevo brillo, a lo que es aburrido, y dar la luz de lo oscuro, el favor de lo que es rechazado, el crédito a lo cual es dudoso,Ä­Æ ­³ºÅº»¹¿Å À±¹´µ¹±Â porque lo más difícil de todas las cosas es darle la naturaleza, la naturaleza de lo que es con todas sus propiedades. Cuando no se pueda alcanzar esto, será hermoso y glorioso el haberlo querido así.
(16) Creo que es mejor intento, el de aquellos que en sus estudios, luego de vencer las dificultades, prefiere el mérito de ser útil al gusto de dar placer. Yo mismo ya he dado ejemplo de esta preferencia en otras obras, y yo soy, lo admito, de escuchar al famoso Tito Livio, autor celebérrimo en el comienzo de su libro de su historia se inició en el origen de Roma, diciendo: Haber alcanzado suficiente gloria para el y poder acabar de escribir, si el espíritu inquieto no necesitase sustentarse en el lugar de trabajo. Seguramente habría sido mejor escribir para la gloria de Roma y en el nombre romano por las victorias, por la gloria de su nombre, habría sido más digno de haber perseverado en el amor de la obra, no por satisfacción personal, y no trabajando para él sino para el pueblo romano.